Por Isaac Guerra
El cinturón interino mosca del Consejo Mundial de Boxeo quedó vacante… y en Monterrey hay una guerrera lista para tomarlo por asalto.
Cecy “La Bomba” Rodríguez (15-1-1, 7 KO’s) no es cualquier pugilista: es una auténtica dinamita regiomontana, destinada no solo a ser campeona del mundo, sino a reinar en varias divisiones. A su carisma y belleza se suma algo todavía más poderoso: un boxeo de calidad, forjado con disciplina, sudor y sacrificio, que la ha llevado a demostrar en el ring que está hecha para las grandes ligas.
Desde que llegó a las manos de su mánager Sergio Reyna, Cecy ha mostrado una evolución impresionante, hilando cuatro victorias clave que la tienen hoy pidiendo la oportunidad de disputar el campeonato mundial:
Primero, cobró revancha ante Lucía “La Rocky” Gutiérrez, a quien noqueó espectacularmente luego de haber empatado previamente.
Después, viajó hasta Chetumal para enfrentarse a la ex campeona mundial Yesenia “La Niña” Gómez, quien había realizado cinco defensas del título, y la derrotó por decisión, demostrando que no le teme a la localía ni a las fajas consagradas.
Posteriormente, peleó en la Ciudad de México dentro de una función encabezada por Floyd Mayweather Jr., abriendo el evento y ganando con autoridad, poniéndose en la vitrina internacional.
Y en su más reciente combate, el 29 de marzo en Cadereyta, Nuevo León, venció por decisión unánime a Mari “La Polvorita” Salinas, una boxeadora clasificada mundial y cinco veces retadora al título del mundo, confirmando que está lista para el siguiente nivel.
Pero si algo la impulsa es saber que viene de barrio bravo donde la historia ha demostrado que desde los rincones más humildes es de dónde salen al estrellato los mejores campeones mundiales.
> “Quiero poner en alto a Monterrey y demostrar que las mujeres del barrio tenemos con qué.”
Al enterarse que Kenia Enríquez fue desconocida como campeona mundial interina del CMB, Cecy no perdió tiempo y alzó la voz, directa al presidente del organismo verde y oro, Mauricio Sulaimán:
> “Señor Mauricio Sulaimán, presidente del Consejo Mundial de Boxeo, se lo pido con respeto pero con el corazón encendido: considéreme para disputar ese campeonato. Sé lo que representa ese cinturón, sé lo que cuesta ganarse su confianza, pero si me da la oportunidad… le aseguro que no le voy a fallar.”
Estas palabras no salieron desde una oficina ni en la comodidad de una entrevista pactada. “La Bomba” lo gritó desde el Deportivo El Jefe en Monterrey, entre guanteos, sudor y golpes reales, con Sergio Reyna afinando su pegada, su velocidad y esa hambre que no cualquiera trae en la sangre.
> “Estoy lista para cualquier rival que el CMB decida ponerme enfrente. No vengo a pedir favores, vengo a ganarme ese cinturón con guerra limpia. Si hay una mujer dispuesta a dejarlo todo arriba del ring, esa soy yo”.
Rodríguez no es solo una cara bonita del boxeo femenil. Es el claro ejemplo de que con corazón, disciplina y orgullo por tus raíces, se puede llegar lejos. Hoy lanza el reto, firme y sin titubeos:
“Ya se hizo a un lado una campeona. Denme la oportunidad de demostrar que en Monterrey también nacen reinas del ring”.
